Tras el gran número de llamadas telefónicas y correos electrónicos recibidos, me atrevo a dejar por escrito lo que puede ser la bienvenida a la sensatez meteorológica. Solecito del bueno. Desayunos de terraza y suplemento dominical. Manga corta y mikolápiz. Por fín. Que bastante le hemos sacado el jamago a la bufanda y a la chaqueta reversible. Que se nos tiene muy vistos. Por eso me he puesto a hacer la fotosíntesis cual chicle de clorofila. Empecé el viernes con el concierto de Russian Red. Crema para el cuerpo. El sábado, cena hasta altas horas de la madrugada en mi terraza. Y el domingo por la tarde, holganza a la remanguillé en la terraza del Sundown coffee hall en Cabo de Gata. Su nuevo cóctel filantropía es pura fisión atómica. Se lo recomiendo. Eso y su nuevo blog.
Fotosíntesis. Por ahora produzco más dióxido de carbono (CO2) que oxígeno (O). Pero es cuestión de tiempo. Digo yo.